Extraction, nueva película estelarizada por Chris Hemsworth, es como cuando los miembros de una banda deciden hacer carrera en solitario…y en el disco aparecen todos sus antiguos compañeros de agrupación. No sólo está producida y co escrita por los hermanos Russo (Avengers: End Game), sino que su director, Sam Hargrave (ésta es su primera película), comenzó como doble de acción («Sabretooth» en Wolverine) y posteriormente, pasó a coordinar las escenas de acción en películas Marvel, desde Winter Soldier hasta Endgame. Para completar el cuadro, Thor en persona la estelariza. Todo queda en familia.
La historia es bastante sencilla y con algunos clichés, pero efectiva: Tyler Rake (Hemsworth) es un mercenario australiano que «es el mejor en lo que hace», pero vive recluido, atormentado por la muerte de su hijo y casi al borde del alcoholismo. (Como suele suceder en estas películas, ese estado lamentable no tiene efecto, ni sobre la buena forma física, ni las increíbles habilidades aeróbicas de los héroes). Rake es contratado para rescatar al hijo del mayor narcotraficante de la India, que fue secuestrado por un rival, «el Pablo Escobar de Bangladesh» le dicen. El resto de la trama es entrar, extraer y salir vivos de todo eso.
Como vehícuo de acción, Extraction es bastante sólida, con un manejo de cámaras bastante creativo y una tendencia a los planos secuencia. Las coreografías de acción son super satisfactorias, innovadoras, sin cortes, ni movimientos violentos de cámaras. Es decir, permiten que uno aprecie los complicados movimientos de artes marciales mixtas y uso de armas de fuego del protagonista y sus enemigos. ¿Les suena conocido? Si, es aquí donde a uno le llega cierto aroma à la John Wick saliendo de la cocina. Pero todo tiene una explicación: Chad Stahelski y Dave Leitch, las mentes detrás de la mega exitosa franquicia de Keanu Reeves (también directores que fueron dobles de acción), son los grandes mentores y amigos del director Hargrave quien, por cierto, no le tiene miedo a experimentar. Un ejemplo es la pelea de este mercenario contra una pandilla de niños, si, niños, en un callejón.
Lo que puede hacerle falta a la película, para hacerla más interesante, quizás sean más sorpresas en el guión. Aún así, la producción tuvo la sabia decisión de darle a Hemsworth un poco de campo para que mostrara sus habilidades dramáticas, no es un drama shakespeareano, claramente, pero el australiano sabe encontrar ciertas notas que sirven, mínimo, como el paréntesis entre los balazos y las persecuciones.
Extraction, vía Netflix, se convierte en uno de los pocos estrenos de los que podemos ver en esta nueva realidad, en la que hemos vivido de repeticiones y noticias de fechas de estreno aplazadas. Fans del cine de acción, buenas coreografías de peleas y de Cris Hemsworth pueden verla tranquilos.
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